¿Cuándo y cómo cambiarle a su propia habitación?

Decidir cuándo y cómo cambiar nuestro peque a su propio cuarto es una decisión muy personal que cada familia toma cuando realmente se sienten preparados para ello. No hay un momento universal ideal para hacer este cambio, pero sí podemos aplicar una serie de criterios y pautas que nos pueden ayudar.

¿Cúando hacer el cambio de habitación?


La AAP (Asociación Americana de Pediatría) y la AEP (Asociación española de pediatría) recomiendan la co-habitación hasta los 6-12 meses. La explicación de esta recomendación la encontramos en que se ha demostrado científicamente que los niños que comparten habitación con sus padres los primeros meses de vida tienen menor riesgo de sufrir el síndrome de muerte súbita del lactante.

La explicación que encontramos en cuanto a esto, es que los bebés que comparten habitación con sus padres, mantienen un sueño más ligero y se despiertan más a menudo para comer, lo que favorece que el bebé no entre en esa fase de sueño muy profundo que se cree que puede estar relacionado con el SMLS

Además, la cohabitación y le colecho seguro los primeros meses favorece la lactancia materna y el descanso de la madre. 

Sin embargo, pasados los primeros 6-12 meses, nos encontraremos con peques que duermen fenomenal y sólo se despierten para hacer sus tomas nocturnas (totalmente necesarias a esta edad) y otros peques, que estos ruidos por la respiración de los padres, movimientos, ronquidos… y esa incapacidad para entrar en fases de sueño profundo, afecten claramente a los despertares nocturnos y la necesidad de usar apoyos de sueño para conciliar el sueño en estos despertares.

Las familias que se encuentran en este segundo grupo, es en este momento cuando pueden plantearse sacar al peque de la habitación y probar si hay mejoría en los despertares. Ahora bien, es importante saber la forma adecuada de hacer esta transición para que las noches de todos mejoren y no se conviertan en noches con idas y venidas constantes de los padres de una habitación a la otra.

Por tanto, no hay una edad idónea para hacer este cambio siempre que sea por encima de los 6-12 meses. Cada familia estará preparada y sentirá la necesidad de hacer esta transición a una edad distinta sin que esto suponga un problema ni por acelerarlo ni por retrasarlo a estar todos preparados.

¿Cómo hacer el cambio de habitación?


Cambiar el lugar de dormir puede ser un cambio emocional importante incluso para los adultos. Fijémonos que incluso a nosotros nos cuentas adaptarnos a dormir en un lugar diferente al habitual las primeras noches cuando nos vamos de vacaciones.Por tanto, deberemos hacer esta transición de manera gradual y teniendo un poco de paciencia y empatía con nuestro peque.

  • Lo primero que deberemos hacer es pasar momentos felices y divertidos en su habitación durante el día. No podemos pretender que nuestro peque se quede tranquilo y contento en su habitación durante la noche si es un lugar totalmente extraño para él.
  • A la vez que pasamos varios días haciendo “happy time” en su habitación durante el día, podemos ir poniéndole en su cuna para dormir para ir reduciendo el contacto si estamos practicando colecho en nuestra cama. Así, poco a poco dormirá en su cuna, al lado nuestro durante unos días antes de que se produzca el cambio.
  • Podemos comenzar haciendo alguna siesta en su habitación y luego pasar a la noche.
  • Una vez que vayamos a hacer el cambio de habitación deberemos hacer el ritual de antes de dormir con nuestro peque dentro de su habitación. Se trata de 15-20 minutos en los que, con luz tenue y sonidos relajantes, podemos leer un cuento, cantar una canción, darle un masaje o hacer cualquier actividad relajante que le indique que toca dormir.
  • Por último, durante varios días podemos trasladarnos con nuestro peque a su habitación y dormir junto a su cuna, para que en los despertares siga sintiéndose acompañado y protegido.
  • Según la edad de nuestro peque, deberemos explicarle que nos quedaremos junto a él hasta que se quede dormido y después papá y mamá se irán a dormir a su habitación.
  • Debéis estar preparados para estar disponibles en los despertares de la noche e ir a atenderle cuando os llame. Así, poco a poco entenderla que, aunque esté en un espacio diferente al vuestro, seguís estando junto a él siempre que lo necesita.

Conclusión

El cambio de habitación es una transición que cada familia decide realizar a una edad diferente.

No hay una edad concreta que sea la ideal para hacer este cambio, sino que el momento ideal será cuando todos los miembros de la familia se sientan preparados para ellos.

Hacer el cambio, de manera gradual y acompañando a nuestro peque en todo el proceso, es la mejor manera de conseguir su aceptación y disfrute de su nuevo espacio.

Cuna en su propia habitación

Si necesitas ayuda con este o cualquier otro aspecto relacionado con el sueño de tu peque puedes contactar conmigo aquí abajo.


Emma Salado, coach sueño bebé

¿Puedo ayudarte?

Soy Emma Salado, matrona y coach de sueño infantil.

¿Tu bebé no duerme bien? ¿Estás preocupada y no sabes qué más hacer? ¿Sus problemas de sueño están afectando a toda la familia?

Creo que puedo ayudarte. Contacta conmigo y te cuento cómo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Carrito de compra